- La alcaldesa se reúne con el presidente de ASCER para recoger las demandas del sector y trasladarlas a Bruselas en diciembre
- Ballester : “Europa tiene que entender la realidad del sector cerámico antes de legislar desde despachos en Bruselas”
Ante el acuerdo alcanzado por la Unión Europea de reducir las emisiones de CO2 de la industria gasintensiva en un 90% en el horizonte 2040 respecto a 1990, la alcaldesa de Onda, Carmina Ballester , ha querido escuchar la postura de la patronal de la cerámica ASCER para trasladar a la Comisión Europea sus peticiones en un próximo viaje oficial.
De este modo, la primera edil se ha reunido con el presidente de ASCER, Ismael García Peris , el vicepresidente, Miguel Nicolás, y con el secretario general, Alberto Echavarría, para tomar nota de las demandas del sector, entre las que se encuentran pedir a Bruselas medidas de flexibilidad para la descarbonización del sector, puesto que consideran los objetivos de reducción de emisiones no van acompasados con la realidad tecnológica y de disponibilidad de infraestructuras y energía limpia a precios competitivos, por lo que cumplir con el objetivo de reducir emisiones en un 90% en los próximos 15 años resulta inviable. Asimismo, también preocupa la supresión prevista, por parte de la UE, de las asignaciones gratuitas de CO2 de cara a 2030, por lo que la industria deberá pagar íntegramente por sus emisiones.
Por otro lado, en el encuentro, en el que también ha participado el concejal de Industria del Ayuntamiento de Onda, Vicente Ramón Peris , se ha abordado la competencia desleal que suponen algunos productos fabricados en países extracomunitarios que no están obligados a la descarbonización, a diferencia del nivel de inversión, control y trazabilidad ambiental altísimo que exige la Unión Europea. “La descarbonización solo será justa si es también competitiva, por lo que si Europa quiere liderar la transición, debe ser coherente con los objetivos ambientales y proteger a quienes producen aquí cumpliendo las reglas”, apuntan desde ASCER.
Otra de las reivindicaciones de la patronal es el control del marcado en origen del azulejo, con el objetivo de identificar bien el producto para evitar engañar al consumidor con cerámica producida en países extracomunitarios.
Agenda en Bruselas
Ante esta situación, Carmina Ballester se ha comprometido a elevar la voz del sector en la Comisión Europea en un viaje oficial a Bruselas que tendrá lugar en diciembre y que comprenderá una intensa agenda con europarlamentarios y representantes de la Comisión. En este encuentro, la también senadora y secretaria de la mesa de Industria del Senado, pedirá una hoja de ruta específica, con metas realistas y asumibles ante la descarbonización de la industria gasintensiva. “Europa tiene que entender la realidad del sector cerámico español, por lo que les invitamos a venir y visitar nuestra industria antes de legislar desde despachos a miles de kilómetros de Castellón, porque una decisión sin conocimiento de causa puede condicionar el futuro de centenares de empresas y repercutir en decenas de miles de empleos”, ha enfatizado la primera edil.
