El almuerzo es mucho más que una pausa para comer en Castelló: es una costumbre profundamente arraigada, una excusa para encontrarse con amigos y disfrutar de un buen bocadillo acompañado de bebida, café o carajillo. Esa esencia cobra protagonismo con la Ruta de l’Esmorzaret dels Barris, una iniciativa que pone en valor la gastronomía popular de los barrios periféricos y convierte el extrarradio en epicentro de la vida social y cultural.
Un recorrido gastronómico único
Cada otoño, bares y restaurantes de distintos barrios periféricos se suman a la ruta ofreciendo un menú especial de almuerzo a precio cerrado. Se trata de una propuesta sencilla pero completa: un bocadillo elaborado con mimo, bebida y café o carajillo.
En cada edición, los establecimientos participantes sorprenden con recetas que van desde los bocadillos más tradicionales —con embutidos, tortilla o pimientos— hasta creaciones más atrevidas, como combinaciones de solomillo con quesos curados, cebolla caramelizada o salsas caseras. Sea cual sea la elección, el objetivo es el mismo: disfrutar de un buen “esmorzaret” en un ambiente distendido.
Los bares participantes
- El Barull
- Bar Roser
- Mesón Casa Laura
- Asador Casa La Abuela
- Restaurante El Roble
- Venta Los Ángeles
- Bar Cazadores
- Bar Benadressa
- Bar Casa Ana
- Casa Lourdes
- Barbados Bar Café
- La Vieja Gramola by La Gallega
- Bar Solsona
- Bar Castalia 14
- Venta Guillamón
- Casa Fran
- Bar Estadio
- Bar Las Planas
Un impulso para los barrios
La ruta tiene también un importante componente social y económico. Con ella se busca dinamizar la hostelería de las zonas periféricas, atraer visitantes a barrios menos transitados y demostrar que la vida gastronómica de Castelló no se concentra únicamente en el centro de la ciudad.
Los bares y restaurantes participantes se convierten, durante estas semanas, en puntos de encuentro para vecinos y visitantes, que no solo almuerzan, sino que también redescubren los rincones y la hospitalidad de cada barrio.