Novembre de 2023 (2ª quincena)

El 26 de mayo de 2021 es uno de los días señalados en el calendario histórico del Villarreal CF. Un día escrito con letras de oro en el libro de momentos memorables, una fecha sublime para la entidad, la afición y, como no, para toda la ciudad de Vila -real. La consecución del primer trofeo, europeo además, del Submarino.

La finalísima

El Villarreal levantó la UEFA Europa League tras ganar al Manchester United (1-1) en una histórica final que se celebró el 26 de mayo de 2021 en Gdansk (Polonia). Tras una eterna tanda de penaltis, en la que lanzaron los 22 futbolistas, el portero amarillo Gero Rulli se convirtió en el héroe al detener el lanzamiento a su homólogo ‘red devil’, David de Gea.

Tras el acierto del guardameta argentino, se desató el júbilo en el Gdansk Stadium, ya eterno testigo de la histórica gesta del Villarreal. Allí, 2.100 aficionados ‘groguets’ se dejaron el aliento y festejaron por todo lo alto la consecución de la primera UEFA Europa League lograda por el Submarino.

Tras las celebraciones, el sueño se hizo realidad. El Villarreal CF ocupó el lugar de los campeones y recibió el preciado trofeo continental en manos de los capitanes amarillos Mario Gaspar y Raúl Albiol, que lo alzaron mostrándolo al mundo entero.

Fiebre amarilla en Vila -real

Fervor ‘groguet’ en Vila -real. Miles de aficionados del Submarino se echaron a las calles para celebrar el título de la UEFA Europa League un día después del histórico triunfo en Gdansk.

El club amarillo organizó una rúa de campeones para brindar el trofeo a su afición. Bajo el lema ‘Europa és nostra’, el equipo realizó un recorrido completo a la ciudad de Vila -real con un autobús descapotable. Partiendo desde el Estadio de la Cerámica, pasó por las principales calles y avenidas de la ciudad antes de volver nuevamente al feudo ‘groguet’.

La respuesta de la hinchada fue impresionante. Miles de seguidores de toda la provincia se acercaron a Vila -real para festejar la victoria con los héroes ‘groguets’.

Posteriormente, el Estadio de la Cerámica acogió una fiesta privada para los jugadores y sus familiares, a la que también asistieron las autoridades locales, la directiva, los patrocinadores y los trabajadores del club. La ceremonia en el campo amarillo echó el telón con un espectáculo pirotécnico.

Un duro y precioso camino a la final

El Villarreal CF recorrió un exigente camino hasta alcanzar la final del torneo continental. En la fase de grupos, el conjunto de Unai Emery se enfrentó al Sivasspor, Qarabag y Maccabi Tel Aviv. Los amarillos quedaron primeros tras cosechar cinco victorias y un empate.

En los dieciseisavos de final, el equipo ‘groguet’ quedó emparejado ante un rival de UEFA Champions League como el FC Salzburg. El Villarreal superó en ambos encuentros al equipo austriaco (0-2 y 2-1) y se clasificó para octavos de final.

El siguiente rival fue el Dynamo Kiev, al que los amarillos derrotaron con contundencia. Un 0-2 y un 2-0 sirvieron para que los ‘groguets’ sacasen el billete para cuartos de final.

El Dinamo Zagreb era el siguiente escollo para el equipo de Unai Emery. Los amarillos sacaron un valioso botín de su visita a la capital croata. Ganaron 0-1 y rubricaron el pase a las semifinales con otra victoria en el Estadio de la Cerámica (2-1). El Submarino avanzaba con paso firme a las semifinales.

En la antesala a la gran final, el rival fue un viejo conocido de los torneos europeos. El Villarreal volvía a verse las caras con el Arsenal FC, que ya había eliminado a los amarillos en un par de ocasiones en competición continental. Esta vez, el Submarino daría un giro a la historia, eliminando al combinado londinense con 2-1 en el Estadio de la Cerámica y un 0-0 en el feudo inglés.

El Villarreal se clasificaba para la final de la UEFA Europa League. En Polonia se iba a medir ante un gigante del fútbol mundial, el Manchester United. Los amarillos doblegaron al equipo inglés y tocaron el cielo en la ciudad de Gdansk. La afición del Villarreal fue clave a lo largo de las eliminatorias, en las previas y también en la final, donde los ‘groguets’ se comieron a los aficionados del Manchester United. La atmosfera que se vivió y como se animo al equipo fue auténticamente memorable.