La Ofrenda floral a la patrona junto a su capilla en el Casco Antiguo ha congregado a cientos de fieles en una jornada de profunda emoción
El domingo 5 de octubre quedará grabado en la memoria colectiva de Oropesa del Mar como una jornada de fe, tradición y emoción compartida.
El día grande de la Virgen de la Paciencia ha congregado a cientos de fieles y devotos de la patrona en los actos religiosos más importantes de las fiestas patronales, culminando con la procesión y ofrenda.
La jornada comenzó a las 11:30 horas con la Misa solemne en honor a la Virgen de la Paciencia en la Parroquia San Jaime , un acto que ha llenado el templo hasta completar su aforo. El momento más esperado ha sido en el que el alcalde del municipio, Rafael Albert , ha entregado la vara de mando a la patrona de Oropesa. La celebración eucarística ha contado con la participación de la Coral San Jaime de Vila -real, cuyas voces han elevado los cantos litúrgicos creando una atmósfera de especial recogimiento y solemnidad. El templo, engalanado para la ocasión, ha acogido a autoridades municipales, a la Comisión de Fiestas y a centenares de oropesinos que han querido honrar a su patrona en su día grande.
La tarde ha traído consigo el broche de oro de un fin de semana tan intenso como emotivo. A las 18:00 horas se ha celebrado el último día del Septenario en la Parroquia San Jaime , dando paso inmediatamente después a la solemne procesión y ofrenda floral que ha recorrido las calles del municipio en un ambiente de profunda devoción para que la imagen de la Virgen de la Paciencia, portada por los peañeros, ha atravesado un recorrido flanqueado por cientos de vecinos que han salido a las calles para acompañar a su patrona.

El cortejo procesional, presidido por las autoridades municipales, las reinas y damas de honor, festeros, vecinos y visitantes, ha avanzado con paso pausado por las calles con los balcones engalanados.
La procesión ha culminado en la Plaza de la Iglesia del Casco Antiguo, donde se encuentra la capilla que es hogar habitual de la Virgen de la Paciencia. Allí, ante una multitud congregada en la plaza histórica del municipio, se ha celebrado la ofrenda a Nuestra Señora de la Paciencia, un momento muy especial para todos los asistentes devotos que han podido expresar su veneración y gratitud a la patrona.
«Hoy hemos vivido el día más emotivo de nuestras fiestas», ha declarado David Juárez, concejal de Fiestas y Juventud. «Ver a cientos de oropesinos acompañando a la Virgen de la Paciencia en su regreso a casa, con esa mezcla de alegría y recogimiento que caracteriza nuestra devoción, es algo que te llena el corazón. La Misa de la mañana con la Coral de Vila -real y el nombramiento de la Virgen como alcaldesa perpetua ha sido preciosa, pero la procesión de la tarde ha sido el momento culmen de toda esta semana. Cuando ves a abuelos con sus nietos, a familias enteras saliendo a las calles, a personas que se emocionan al paso de la Virgen, entiendes que esto no son solo fiestas, esto es nuestra identidad, nuestra historia, lo que nos une como pueblo».
El alcalde de la localidad, Rafael Albert , ha destacado la importancia de este día histórico: «Hoy ha sido un día muy emocionante para mí porque, además de ser el día más importante de estas fiestas patronales, hemos vivido un momento histórico con el nombramiento de la Virgen de la Paciencia como alcaldesa perpetua, que nunca se volverá a repetir».
La devoción a la Virgen de la Paciencia permanece intacta, transmitiéndose de generación en generación como un legado inmaterial que une pasado, presente y futuro de Oropesa del Mar.