En Benicàssim, una banda de cuatro individuos encapuchados protagonizó ayer un asalto relámpago en una joyería, donde lograron llevarse piezas valoradas en unos 300.000 euros. Los ladrones rompieron el escaparate a golpes para acceder al botín y huyeron rápidamente en un coche de alta gama.
Minutos después, comenzó una persecución policial que se dirigió hacia la zona del Desert de les Palmes. Durante la huida, los fugitivos liberaron el contenido de un extintor creando una nube que redujo drásticamente la visibilidad de los agentes y les permitió desvanecerse sin dejar rastro.
La Guardia Civil ha asumido la investigación y analiza las grabaciones de seguridad del establecimiento con el objetivo de identificar y localizar a los responsables del robo.
