La Policía Local de Castellón ha tramitado en lo que llevamos de 2025 un total de 29 denuncias por vertidos incontrolados de residuos en la vía pública, según los últimos datos municipales. De ellas, 25 corresponden a infracciones de la Ordenanza de Convivencia Ciudadana y cuatro a la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados.
Las sanciones afectan a conductas como el abandono de muebles, colchones y electrodomésticos, la reparación de vehículos en la calle generando residuos, el depósito de escombros o la quema no autorizada de restos de poda. Las multas pueden alcanzar en conjunto los 8.780 euros, con un máximo de 750 euros por infracción de la ordenanza y hasta 3.200 euros en los casos contemplados en la legislación estatal.
Durante todo 2024 se tramitaron 37 sanciones, por lo que la tendencia de 2025 apunta a superar la cifra del ejercicio anterior.
El consistorio asegura que el incremento de denuncias se debe a una campaña de control más exhaustiva que incluye patrullas específicas, vehículos camuflados y, próximamente, la instalación de cámaras en puntos conflictivos como el Camí Fondo, el Camí Serradal, el Camí d’En Riera o el Camí d’En Trilles, en la zona de la Marjalería.
La alcaldesa, Begoña Carrasco, defiende que se está aplicando una política de “tolerancia cero” frente a estas prácticas. “No podemos permitir que unos pocos perjudiquen la imagen y la convivencia de la mayoría”, señaló, aunque reconoció que “mantener la ciudad limpia no depende solo de sanciones, sino también de la colaboración vecinal y de la eficacia de los servicios de recogida”.
En este sentido, el servicio municipal ha reforzado la recogida de enseres con dos camiones adicionales que se suman a los tres habituales. Los vecinos pueden solicitar la retirada gratuita de muebles y voluminosos a través del teléfono 964 216 134, o llamar al 010 para la recogida de restos de poda.