- Los sindicatos de Mesa Sectorial de Sanidad exigen la dimisión del conseller Marciano Gómez
Los sindicatos SATSE, CCOO, UGT, CSIF, INTERSINDICAL SALUT y SAE se han concentrado hoy lunes, 26 de mayo, frente al Palau de la Generalitat para reclamar al president, Carlos Mazón, una solución frente al deterioro de la Sanidad pública valenciana y ante la falta de diálogo del conseller de Sanidad, Marciano Gómez .
El personal de la sanidad y la ciudadanía llevan meses siendo víctimas de la mala gestión de esta conselleria y desconocen si el president de la Generalitat es consciente de la deriva que ha tomado. “Nos encontramos ante una situación insostenible”, han señalado los sindicatos convocantes, “ya que el conseller ha pasado de incumplir sus compromisos y paralizar la negociación colectiva a demostrar que carece de la capacidad necesaria para gestionar”.
La Conselleria de Sanidad no ha convocado a los sindicatos a la Mesa Sectorial desde hace más de seis meses -noviembre de 2024-, en una situación inédita e irregular que es reflejo de la nula voluntad de negociación de esta Administración. Cuando Gómez llegó a su cargo realizó algunos intentos de consenso en varios borradores de acuerdos y propuestas, aunque pronto quedó claro que pretendía que los sindicatos los aceptaran sin alegaciones, sin aportaciones y sin ajustes.
En los últimos meses se han sucedido decisiones unilaterales, imposiciones verticales y un desprecio sistemático al diálogo social que recuerdan, lamentablemente, a etapas superadas de nuestra historia. La falta de transparencia y la eliminación de espacios de negociación está generando un clima de tensión innecesario e improductivo.
Marciano Gómez confunde autoridad con autoritarismo. La imposición de medidas no puede ser la base de una política sanitaria moderna, participativa y orientada al bien común. La Conselleria de Sanidad no había conocido una etapa de tan profundo deterioro en las relaciones laborales ni una desconexión tan evidente con la realidad de los centros de salud y hospitales.
Así, los sindicatos exigen la convocatoria urgente de la mesa de negociación, respetando los principios de diálogo, transparencia y negociación real. No tolerarán que se les trate con desdén, y que los derechos laborales sean constantemente menospreciados a través de propuestas de acuerdo que, lejos de mejorar, solo empeoran la situación.
Las quejas de los sindicatos hacia el conseller se deben a varios aspectos, como el incumplimiento de los siguientes compromisos:
1.- Sanidad revoca la posibilidad de cogerse excedencias
La Conselleria de Sanidad ha emitido recientemente una instrucción que modifica el sistema de gestión de las excedencias y lo hace, precisamente, cuando están finalizando los diferentes procesos selectivos de todas las categorías profesionales.
La limitación de las excedencias y los servicios bajo otro régimen jurídico, sin ofrecer una justificación adecuada ni alternativas reales, agrava todavía más las dificultades de conciliación de los trabajadores y trabajadoras del ámbito sanitario.
2.- Negociación de las 35 horas semanales paralizada
Los sindicatos llevan meses reclamando la implantación de la jornada laboral de 35 horas semanales según lo establecido en el acuerdo firmado en marzo del 2023 o, en su defecto, la renegociación de los plazos para su puesta en marcha este mismo año.
La jornada de 35 horas es de justicia para el personal sanitario, que lleva años arrastrando una sobrecarga laboral crónica agravada por la falta de personal y el aumento de la demanda asistencial.
“Trabajamos jornadas extenuantes, con turnos que no permiten la conciliación ni el descanso necesario para cuidar con calidad y seguridad”, han expresado los portavoces sindicales. “Por ello, reivindicamos las 35 horas como un derecho y como una medida imprescindible para garantizar una atención digna a la ciudadanía”, concluyen.
3.- Procesos selectivos atrasados
La Conselleria de Sanidad ha incumplido los plazos establecidos para la finalización de los procesos selectivos, que, según lo dispuesto en la Ley 20/2021, deberían haberse completado, a más tardar, el 31 de diciembre de 2024. Este retraso reiterado refleja la absoluta falta de respeto hacia los miles de profesionales que esperan un empleo estable.
Por ello, los sindicatos exigen una planificación clara y precisa sobre las fechas de finalización de los procesos selectivos y una gestión más eficiente y responsable de los recursos humanos.
4.- Otros temas incumplidos son la mejora de las agendas, la reducción de listas de espera o la puesta en marcha de la figura de la enfermera escolar, entre otros.
También hay otras medidas que están desmantelando la sanidad pública:
1.- Decreto de funcionamiento de Atención Primaria obsoleto y despilfarrador
Otra iniciativa de la conselleria que, por ahora, se mantiene paralizada gracias a la presión de los sindicatos convocantes. Esta norma supone un retroceso para la sanidad pública y no aborda los problemas estructurales de la Atención Primaria. Todo lo contrario, ya que degrada las condiciones laborales del personal sanitario, reduciendo su autonomía y limitando los recursos necesarios para un trabajo digno y eficaz.
Este Decreto impone un modelo de gestión autoritario y obsoleto, ajeno a las recomendaciones de organismos nacionales e internacionales, priorizando recortes y estructuras de control innecesarias frente a las verdaderas necesidades asistenciales.
Por ello, los sindicatos reclaman más autonomía organizativa y capacidad de decisión para los equipos, en un entorno de colaboración interna y con la ciudadanía. Además, de una Atención Primaria fuerte con la financiación adecuada, las plantillas dimensionadas a las ratios de población, el tiempo suficiente para cada consulta y el respeto a los derechos de salud laboral de la plantilla.
2.- Decreto de alerta de Salud Pública paralizado
Los sindicatos convocantes denunciamos la inaceptable demora en la publicación en el DOGV del Decreto que regula el sistema de alerta precoz y respuesta rápida en Salud Pública (SAPRR-CV), lo que impide su entrada en vigor y retrasa de forma injustificable la puesta en marcha de un instrumento clave para la protección de la Salud Pública. Es una herramienta fundamental ante amenazas sanitarias emergentes o posibles catástrofes.
3.- Un compromiso real con la atención sanitaria urgente SAMU
El “Plan funcional para la atención urgente”, que también mantiene paralizado la conselleria, supone el desmantelamiento del Servicio de Emergencias Sanitarias (SES-CV) y la ralentización de los tiempos de respuesta del servicio de emergencias. Este Plan pretende que el personal del SAMU deje de dedicarse exclusivamente a atender emergencias y atienda a los pacientes de las Urgencias de los hospitales o pasen consulta en los centros de salud más cercanos.
Por todo ello, las organizaciones convocantes han concluido: “nos preocupa profundamente que el conseller prefiera negar la realidad antes que asumir sus responsabilidades. Las consecuencias de sus decisiones erróneas ya se perciben en el empeoramiento de la asistencia sanitaria, el aumento de las listas de espera, el desánimo del personal y la confusión entre los usuarios/as”.
SATSE, CCOO, UGT, CSIF, INTERSINDICAL SALUT y SAE apelan al president de la Generalitat como responsable último de la Sanidad de la Comunitat, y le advierten que no dudarán en convocar todas movilizaciones necesarias si la Conselleria de Sanidad persiste en su actitud de incumplimiento de compromisos y falta de respeto hacia sus profesionales.